El valor de la obra de Arte

El valor del arte es un tema que nos hemos cuestionado todo el tiempo entre artistas, espectadores, galeristas, coleccionistas y casas de subasta.

La pintura, la escultura, la danza, la música son arte que tienen un valor tanto cultural como monetario, pero ¿por qué no es lo mismo comprar una obra de arte a un boleto para un concierto o una escultura? ¿Acaso el valor del arte está en la firma del artista?

En el mercado podemos encontrar obras de arte con precios exorbitantes llevándonos a cuestionar el porqué de ellos o qué es lo motivaría a una persona a gastar tantísimo dinero en una obra de arte cuando hay gente que prefiere descargar canciones gratis a pagar un boleto de concierto.

Dentro del arte, el valor de una obra es el precio que alguien está dispuesto a pagar por ello en un momento y lugar dado.

Pero entonces, ¿quién o qué determina el precio?

Sabemos que la experiencia de cada creador en una obra es tan diversa como la cantidad de personas que la aprecian, lo que nos hace pensar, ¿dónde está el arte? ¿está en lo que vemos, en lo que sentimos, pensamos o reaccionamos? De ser así, entonces cómo determinamos el valor, si para unos es valioso, y para otros no; es por lo que hace sentir, por la técnica que emplea, o la firma.

Pues bien, para ello influyen muchos factores y aspectos como el éxito y popularidad de un artista, el mercado, lugares donde ha sido expuesto, así como la calidad artística de la obra o su autor.

Factores que contribuyen al valor de una obra de arte:

• Reputación: aquí se considera el grado de reconocimiento que tenga el autor de la obra dentro del medio, así la crítica especializada de la propia obra; también se toma en cuenta lo poco o mucho que la obra haya sido incluida en exposiciones.
• Demanda: Este factor va de la mano del anterior, puesto que, a mayor reputación, mayor será la demanda de la obra; y a mayor demanda, mayor será el precio. Es importante mencionar que la demanda de un autor no siempre es homogénea, es decir, llega a ser por periodos, en donde la competencia hace que se disparen los precios por encima de lo estimado.
• Procedencia: ¿Qué historia tiene la obra?, ¿De dónde viene?, ¿ha formado parte de algún suceso histórico? ¿Perteneció a alguna celebridad? ¿ha sido parte de una colección real? Las respuestas a estas preguntas pueden hacer que el precio se multiplique, dando un valor añadido más al objeto sin relación alguna con su calidad artística.
• Mercado de venta: Este factor está muy ligado a los dos primeros, es decir, el hecho de que un artista tenga muy buena reputación y demanda en México signifique que la tenga en Colombia, por lo que sus obras no podrían ser adquiridas al mismo precio en ambos lugares, puesto que la demanda se limita a un territorio en concreto. El precio del arte dependerá del mercado en el que se ponga a la venta.
• Originalidad: este factor es más común en la pintura y escultura, ya que interviene la rareza de cada obra, de la cantidad de obras idénticas o similares del mismo, así como la disponibilidad de las mismas en el mercado. Una obra original y siempre van a ser valoradas más que aquellas de las que existen copias originales; es decir que, a mayor número de copias, mayor será la oferta en el mercado y por consiguiente menor el precio de la obra.

En Capital del arte creemos que el valor del arte va más enfocado en lo que hace sentir, cuando es consecuente con su tiempo, con su entorno, cuando intenta decir algo en medio del silencio, cuando es una luz en la oscuridad.

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